Seguramente, más de una persona debe pensar que la buena época de Genesis terminó en 1975, con la partida de Peter Gabriel. Otros creerán que no, que en realidad Genesis se puso entretenido cuando Gabriel se fue y Phil Collins se puso en el micrófono. Yo adhiero, sin embargo, a la teoría de que existieron principalmente "cuatro Genesis": uno antes de Trespass, otro entre dicho disco y The Lamb Lies Down on Broadway, un tercero -ya sin Peter- entre A Trick of the Tail y ...And Then There Were Three... y un último a partir de Duke. El disco que me ocupa hoy, Wind & Wuthering, vendría a ser el segundo de la tercera etapa. Y acá tengo una suerte de discrepancia conmigo mismo: A Trick of the Tail me parece el más logrado de los tres grabados durante esta etapa y, así y todo, Wind & Wuthering me gusta más.
La redundancia de teclados es innegable -claramente, el tecladista Tony Banks estaba empezando a tener mucha más presencia que el guitarrista Steve Hackett-, cubriendo todo con capas de diferentes efectos, alumbrando con la luz neblinosa de la portada del álbum. Así y todo, el sonido está lejos del de aquellos músicos que hicieron una "mala lectura" del rock sinfónico, atacando con teclados y sintetizadores como si no existieran otros instrumentos ni otras finalidades más que mostrar lo rápido que pueden mover los dedos (léase, por ejemplo, Rick Wakeman). Por el contrario, Banks en particular y Genesis en general intentan crear texturas, emociones, paisajes, climas. Y lo logran más que bien, desde mi punto de vista.
Las composiciones son creativas y complejas -todavía no habían llegado los años de numerosos hits radiales -excepto por la dulce Your Own Special Way-, los bajos de Mike Rutherford son gordos y pesados, las guitarras sutiles y sensibles, las baterías siempre bestiales. Ahora, si bien Collins siempre deslumbró como baterista, acá también se nota una fuerte evolución como cantante con respecto a A Trick of the Tail, provocando emociones más profundas y logrando una mayor expresividad. Sea como sea, y teniendo en claro que al Genesis post-'75 se lo suele afrontar con prejuicios, Wind & Wuthering me resulta un disco más que recomendable, en el que el ahora cuarteto explora diferentes terrenos, cruzando el pasado y el futuro con una habilidad asombrosa y logrando, en medio de esa búsqueda, un sonido que nunca se repitió, ni en ellos ni en ninguna otra banda.
01 - Eleventh Earl of Mar
02 - One for the Vine
03 - Your Own Special Way
04 - Wot Gorilla?
05 - All in a Mouse's Night
06 - Blood on the Rooftops
07 - 'Unquiet Slumbers for the Sleepers...
08 - ...In That Quiet Earth'
09 - Afterglow
2 comentarios:
Y si, inevitablemente estoy de acuerdo. Aunque me siga gustando Duke, y le tenga cariño a los discos Genesianos de los ochenta. Que se le va a hacer.
>Natalio
Aunque te parezca mentira, en estas últimas semanas aprendí a disfrutar algunas canciones de los discos que van de Duke para adelante. No me gustan en general, pero algunas cosas están bien. Pero Wind & Wuthering... Wind & Wuthering sigue siendo superior.
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